miércoles, 30 de diciembre de 2015

Conceptos cuantitavios en educación infantil: Grande y pequeño



Cuento "Rufo" el ratón: conceptos grande y pequeño

A partir del cuento breve “Rufo”, el ratón podemos introduciremos los conceptos matemáticos grande y pequeño.

Después de contarlo y charlar sobre los personajes y su diferencia de tamaño, se pueden realizar actividades manipulativas donde los niños y niñas clasifiquen objetos diferentes atendiendo a este criterio. Así los objetos quedarían agrupados de esta forma:

-    Objetos pequeños, como “Rufo”.
-    Objetos grandes, como “Luci”.

Más tarde podremos añadir el tamaño mediano.

Es esencial que los niño y niñas a prendan estos conceptos a través de la experiencia manipulativa. Sin embargo, bajo mi punto de vista, una presentación en forma de cuento es una herramienta lúdica que encanta a los más pequeños.


RUFO, EL RATÓN

Rufo, un ratón pequeño,
que además es elegante,
se ha comprado un traje nuevo
y a juego se ha puesto guantes.

¡No sabe lo que le espera!
¡Lo que le espera al tunante!


Va a conocer en un rato
a una señora importante,
por muy pequeño que sea
espera lograr gustarle.

¡No sabe lo que le espera!
¡Lo que le espera al tunante!


Cuando ya llega la hora,
la sorpresa fue muy grande,
pues la coqueta señora
era Luci, la elefante.

¡Ya sabe lo que le espera!
¡Corre Luci y él delante!


jueves, 10 de diciembre de 2015

Educación infantil: Conceptos mucho y poco


 Cuento infantil “Villa cantidad”

Con este cuento titulado “Villa Cantidad” pretendemos varios objetivos:

En primer lugar, introducir los conceptos básicos lógico-matemáticos de “mucho” y “poco”. Son dos conceptos opuestos, cuantificadores, que deber ser trabajados en educación infantil.

Además podemos mostrar valores como el trabajo en equipo, la satisfacción que da trabajar por el bien común, etc.

Seguro que se os ocurren otras muchas formas de sacarle partido.

Villa Cantidad

      Villa Cantidad estaba en periodo de elecciones. Habían pasado cuatro años de tranquilidad y sus habitantes tenían que elegir un nuevo alcalde o alcaldesa.

       Para ello, se presentaron dos candidatos. Podían elegir por un lado a don Poco, un hombre inteligente y honrado, aunque eso sí, un pelín tacaño. Doña Mucho, la otra candidata, era generosa y amable, pero bastante gritona.

       Llegó el día de votar. Todos los habitantes de Villa Cantidad se reunieron en la plaza del pueblo para oír a los dos candidatos una vez más antes de elegir.

       Los dos, en lo más alto de la plaza, defendían su postura:

       - Si soy yo el elegido, -Dijo don Poco – este pueblo tendrá un parque, un médico, un colegio un poco más grande. Tendremos poca contaminación, poco tráfico, pocos problemas…

- Si me eligen a mí

– Interrumpió doña Mucho – tendremos más de todo, porque creo que hace falta más de un médico, otro colegio, muchas zonas de juego para los niños, en fin, tendremos mucho de todo.

       Los vecinos del pueblo seguían confusos, ¡claro!, si elegían a don Poco tendrían problemas, pero no es bueno tener pocos médicos, poco trabajo… Por otro lado, si doña Mucho se convertía en alcaldesa, tendrían muchas cosas buenas, pero también mucha contaminación, mucho tráfico…

       “¿Qué hacemos?”, se preguntaban los habitantes de villa Cantidad, pensando que ni don Poco ni doña Mucho serían adecuados para la alcaldía del pueblo.

       Entonces, el joven Sebastián tuvo una gran idea. Se subió en la parte más alta de la plaza y comenzó diciendo:

       -Habitantes del pueblo, acabo de darme cuenta de que podemos buscar una solución. ¿Creéis que es bueno tener muchos árboles, muchos parques o muchos puestos de trabajo?

       - ¡Sííí! – Gritaron los habitantes de villa Cantidad.

       -¿Y pensáis – continuó el muchacho – que debemos tener poco tráfico, poco ruido o poca suciedad?

       -¡Claro! – contestaron.

       -Entonces la solución es que don Poco y doña Mucho compartan la alcaldía, que manden los dos para que así haya pocas cosas de las que sea bueno tener pocas y muchas de las que sea bueno tener muchas.

       Todos quedaron contentos con la idea de Sebastián. Don Poco y doña Mucho se dieron un abrazo y organizaron una fiesta.
  
       Villa Cantidad iba a ser el pueblo mejor organizado de toda la ciudad.

Aquí os dejo el video. Espero que os guste!